Delante del ardor de su ira
¿El día de Jesús es terrible,… y de ardor de
ira,… para convertir la tierra en soledad, y raer de ella a sus
pecadores, y castigar al mundo por su maldad, y a los impíos la
iniquidad,…?
“9He
aquí el día de Jesús viene,
terrible, y de indignación y ardor de ira,
para convertir la tierra en soledad,
y raer de ella a sus pecadores.
10Por lo cual las estrellas de los cielos y sus luceros no darán su luz;
y el sol se oscurecerá al nacer, y la luna no dará su resplandor. 11Y
castigaré al mundo por su maldad, y a
los impíos por su iniquidad; y haré que cese la arrogancia de los soberbios, y
abatiré la altivez de los fuertes. 12Haré más precioso
que el oro fino al varón, y más que el oro de Ofir al hombre. 13Porque haré estremecer los cielos, y la tierra se moverá de su lugar,
en la indignación de Jesús de los ejércitos, y en el
día del ardor de su ira.” (Isa. 13:9-13; Para ver
también que acontece en el día grande de Jesús ver. Sof. 1:14-18)
¿Por qué no quisieron andar en los caminos de
Jesús ni oyeron sus leyes los Israelitas… derramo Jesús ardor de ira
sobre ellos, y fuerza de guerra… y les puso fuego por todas
partes,… pero a pesar de ello no hizo caso?
“23¿Quién de
vosotros oirá esto? ¿Quién atenderá y escuchará respecto al porvenir? 24¿Quién
dio a Jacob en botín, y entregó a
Israel a saqueadores? ¿No
fue Jesús, contra quien pecamos? No quisieron andar en sus caminos, ni oyeron su ley.
25Por tanto, derramó sobre él el ardor de
su ira, y fuerza de guerra;
le puso fuego por todas partes, pero no entendió; y le consumió, mas
no hizo caso.” (Isa. 42:23-25 ver también Lam. 2:3; Lam.
4:11-13; Eze. 22:17-31) ¿Sobre quien
más Jesús hace mal, ardor de ira y espada hasta que los acaba…? “35Así
ha dicho Jesús de los ejércitos: He aquí que yo quiebro
el arco de Elam, parte principal
de su fortaleza. 36Traeré sobre Elam los
cuatro vientos de los cuatro puntos del cielo, y
los aventaré a todos estos vientos; y no habrá nación a donde no vayan
fugitivos de Elam. 37Y haré que Elam se
intimide delante de sus enemigos,
y delante de los que buscan su vida;
y traeré sobre ellos mal, y el ardor de mi ira,
dice Jesús; y enviaré en pos de
ellos espada
hasta que los acabe. 38Y pondré mi trono en Elam, y
destruiré a su rey y a su príncipe,
dice Jesús. 39Pero acontecerá en los
últimos días, que haré volver a los cautivos de Elam, dice Jesús.”
(Jer. 49:35-39) ¿Jesús
manda a salir de Babilonia, por que también caerá el ardor de la ira de Jesús
sobre ella… y destruye sus ídolos y su tierra será avergonzada y sus
muertos caerán en medio de ella… ya que del norte vendrán
destruidores…?
“45Salid de en medio de ella,
pueblo mío, y salvad cada uno su vida del ardor de la ira de Jesús. 46Y
no desmaye vuestro corazón, ni temáis a causa del rumor que se oirá por la
tierra; en un año vendrá el rumor, y después en
otro año rumor, y habrá violencia en la
tierra, dominador contra dominador.
47Por
tanto, he aquí vienen días
en que yo destruiré los ídolos de Babilonia, y toda su tierra será avergonzada, y
todos sus muertos caerán en medio de ella. 48Los
cielos y la tierra y todo lo que está en ellos cantarán de gozo sobre
Babilonia; porque del norte vendrán contra ella destruidores, dice Jesús.
49Por los
muertos de Israel caerá Babilonia, como por Babilonia cayeron los muertos de toda la tierra.” (Jer.
51:45-49; Ver también Apoc. 18:1-24; Apoc. 16:17-21) ¿Cuándo Jesús se levante para juzgar…
reunirá a las naciones, y juntará a los reinos y derramara su enojo y
todo el ardor de su ira… en aquel tiempo Jesús devolverá a los pueblos
pureza de labios,… para que todos invoquen el nombre de Jesús y le
sirvan de común consentimiento…? “8Por tanto, esperadme, dice Jesús, hasta el día que me levante para juzgaros; porque mi
determinación es reunir las naciones,
juntar los
reinos, para derramar sobre ellos mi
enojo, todo el ardor de mi ira; por el fuego de mi
celo será consumida toda la tierra… 9En aquel tiempo
devolveré yo a los pueblos pureza
de labios, para que todos invoquen el nombre
de Jesús, para que le sirvan de
común consentimiento. 10De la
región más allá de los ríos de Etiopía me suplicarán; la hija de mis esparcidos traerá mi ofrenda.” (Sof. 3:8-10)
¿Cuándo el mal vaya de nación en nación y se levante
grande tempestad de los fines de la tierra… yacerán los muertos de
Jesús desde un extremo de la tierra hasta el otro… y se cumplen los
días de los pastores y mayorales,… para que sean degollados y
esparcidos,… y Jesús asole sus pastos… ya que los pastos
delicados son destruidos por el ardor de la ira de Jesús?
“32Así ha dicho
Jesús de los ejércitos: He aquí que el mal irá de
nación en nación, y grande
tempestad se levantará de los fines de la tierra. 33Y yacerán
los muertos de Jesús en aquel día desde un extremo de la tierra
hasta el otro; no se endecharán ni se recogerán ni serán enterrados; como estiércol quedarán
sobre la faz de la tierra.
34Aullad, pastores, y clamad;
revolcaos en el polvo, mayorales del rebaño;
porque cumplidos son vuestros días para que
seáis degollados y esparcidos, y
caeréis como vaso precioso. 35Y se acabará la huida de los pastores,
y el escape de los mayorales del rebaño. 36¡Voz de la gritería de
los pastores, y aullido de los mayorales del rebaño! porque Jesús asoló sus pastos. 37Y los pastos
delicados serán destruidos por el ardor de la ira de Jesús. 38Dejó
cual leoncillo su guarida; pues asolada fue la tierra de ellos por la ira del
opresor, y por el furor de su saña.” (Jer. 25:32-38)
¿Hasta cuando no se calmara el ardor de la ira de
Jesús…?
“23He aquí, la tempestad de Jesús sale con furor;
la tempestad que se prepara, sobre la cabeza de
los impíos reposará. 24No se calmará el ardor
de la ira de Jesús, hasta que haya
hecho y cumplido los pensamientos de su corazón; en el fin de los días
entenderéis esto.” (Jer. 30:23-24)
¿Si Jesús es propicio a su tierra,… entonces
perdona la iniquidad de su pueblo… reprime todo su enojo y se aparta del
ardor de su ira?
“1Fuiste
propicio a tu tierra, oh Jesús; Volviste la cautividad
de Jacob. 2Perdonaste
la iniquidad de tu pueblo; Todos los pecados de ellos
cubriste. 3Reprimiste todo tu enojo; Te apartaste del ardor de tu ira.” (Sal. 85:1-3) ¿Jesús se aparto del ardor de su ira y no
destruyo Nínive… porque clamaron a Jesús fuertemente,… y se
convirtieron de su mal camino…? “6Y llegó la noticia hasta
el rey de Nínive, y se levantó de su silla, se
despojó de su vestido, y se
cubrió de cilicio y se sentó sobre ceniza.
7E hizo proclamar y anunciar en Nínive, por mandato
del rey y de sus grandes, diciendo: Hombres
y animales, bueyes y ovejas, no gusten cosa alguna; no se les dé alimento, ni
beban agua; 8sino cúbranse de cilicio hombres y animales, y clamen a
Dios fuertemente; y conviértase cada uno de su mal camino, de la rapiña
que hay en sus manos. 9¿Quién sabe si se volverá y se arrepentirá
Dios, y se apartará del ardor de su ira,
y no pereceremos? 10Y vio Dios lo que hicieron, que se convirtieron de su mal
camino; y se arrepintió del mal que había dicho que les haría, y no lo hizo.”
(Jon. 3:6-10)
¿Quién puede quedar en pie en el ardor del enojo de
Jesús,…?
“6¿Quién permanecerá delante de su ira? ¿Y quién quedará en pie en el ardor de su enojo? Su ira se derrama como fuego, y por él se hienden las peñas. 7Jesús es bueno, fortaleza en el día de la angustia; y conoce a los que en él confían. 8Mas con inundación impetuosa consumirá a sus adversarios, y tinieblas perseguirán a sus enemigos” (Nah. 1:6-8 ver también Nah. 1:7-11)